Ciudad de México, 12 de noviembre. – Airbnb ha remitido más de 650 millones de pesos en concepto de Impuesto sobre Hospedaje (ISH) en la Ciudad de México desde que comenzó a retener y remitir este impuesto en 2017.
Solo en 2024, hasta el 30 de septiembre, la plataforma ha aportado más de 150 millones de pesos a las autoridades, consolidándose como la principal recaudadora de este impuesto en el país.
Este monto es el resultado de un acuerdo entre Airbnb y el gobierno de la CDMX, que convierte a la capital en la primera ciudad en Latinoamérica en formalizar este tipo de recaudación a través de una plataforma digital.
El ISH grava los servicios de hospedaje de anfitriones locales, y en promedio, un 28% del precio total de las reservas realizadas en la plataforma se destina a los impuestos locales y federales de acuerdo con la reforma fiscal a plataformas digitales de 2020.
Con la firma de estos convenios, Airbnb ha promovido la formalización y sostenibilidad del turismo en las localidades donde opera, cumpliendo con la normativa fiscal local e impulsando el cumplimiento fiscal entre sus anfitriones.
Sin embargo, la plataforma advierte que las nuevas restricciones regulatorias de la Ciudad de México, que limitan el uso de Estancia Turística Eventual al 50% de las noches al año, podrían afectar considerablemente la recaudación del ISH y la disponibilidad de alojamientos en la capital.
Airbnb afirma que estas medidas, que considera anticompetitivas, podrían disminuir las opciones de hospedaje y afectar a miles de familias y pequeños emprendedores en beneficio del turismo tradicional.
La empresa sostiene que regulaciones similares en ciudades como Nueva York y Barcelona han incentivado la informalidad, afectando la economía local y elevando los costos de hospedaje tradicional y de alquiler a largo plazo.
En México, Airbnb tiene acuerdos de impuestos con 19 estados, incluidos Quintana Roo, Estado de México, Jalisco, Oaxaca y Yucatán, lo que ha generado una recaudación de 2,200 millones de pesos en ISH a nivel nacional entre 2017 y 2023.
Además del impacto económico de las contribuciones de los anfitriones, Airbnb destaca el papel de estos en el fortalecimiento de las economías locales.
Según la empresa, el 90% de los anfitriones en la CDMX recomienda a sus huéspedes negocios tradicionales fuera de las zonas turísticas, como restaurantes, tiendas de artesanías y cafeterías. Este tipo de consumo, asegura la plataforma, generó en 2023 una derrama económica adicional de 15,000 millones de pesos y apoyó más de 63,000 empleos en la ciudad.
La plataforma sostiene que, por cada dólar gastado en alojamiento en Airbnb, los visitantes gastan aproximadamente tres dólares adicionales en servicios locales, extendiendo los beneficios del turismo a más familias y negocios en la capital mexicana.