Ciudad de México, 23 de junio. Con menos de un kilómetro por liberar en el Tramo Seis del Tren Maya, el cual unirá a las ciudades de Tulum y Chetumal, en Quintana Roo, las acciones de salvamento arqueológico en el derecho de vía de esta obra ferroviaria a cargo de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), se aprestan a su conclusión total.
Al participar en la “mañanera” el director general del INAH, Diego Prieto Hernández, informó que, al día de hoy, se han otorgado los vistos buenos de obra para los tramos uno, dos, tres, cuatro, cinco y siete de la obra ferroviaria, y hay un avance del 99.7% en el seis.
“El Tren Maya nos ha dado la oportunidad de realizar la más extensa investigación de salvamento arqueológico en la historia del país, y de la cual obtendremos conocimientos sobre las civilizaciones y culturas que florecieron en el sureste mexicano y articularon en su diversidad lingüística, social, geográfica y económica a la gran nación maya”, señaló.
El antropólogo reconoció la labor de los diversos especialistas que colaboran en las obras constructivas del Tren Maya como en el desarrollo del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza), el cual optimiza la visita pública, la investigación y la conservación de 26 de estos sitios cercanos a la ruta del ferrocarril.
Hasta ayer, se han registrado y preservado 53,568 bienes inmuebles (basamentos, albarradas, nivelaciones, cimientos o unidades habitacionales); 1’111,608 tiestos cerámicos; 1,844 elementos muebles (metates, figurillas y otras piezas cerámicas); 765 vasijas; 597 osamentas humanas y 1,348 rasgos naturales (cuevas, cenotes o cavernas inundadas y semi inundadas) que se han identificado en asociación con la presencia humana de la antigüedad.
Prieto Hernández destacó los trabajos que se desarrollan en la Zona Arqueológica de Muyil, en Quintana Roo, como parte del Promeza, los cuales abarcan la investigación y inconservación de estructuras arqueológicas, así como la optimización de los servicios a visitantes.
Como parte de estas acciones, se renueva la señalética del sitio, se amplía el estacionamiento y se edifica una nueva unidad de ingreso y recepción de turistas.
Igual se habilita una sala introductoria para brindar una experiencia más comprensiva de este asentamiento prehispánico, el cual se localiza a 20 kilómetros de la ciudad antigua de Tulum, en la Reserva de la Biosfera de Sian Ka’an.
Indicó que Muyil, cuyo nombre es homónimo al de una de las lagunas adyacentes al sitio, es también conocido como Chunyaxché, y basó su economía en la pesca y en la explotación de sus terrenos selváticos circundantes. Su ocupación se remonta al periodo Preclásico Tardío (300-50 a.C.), hasta el Posclásico Tardío (1200-1450 d.C.).